1.1 Qué es historia económica

 

Se puede decir que el objeto de la historia económica es entender cuál ha sido y qué ha causado el desenvolvimiento de la economía en general, de un sector, de una actividad o grupo poblacional en un lugar y periodo determinados. Se pretende dilucidar cuál ha sido el desempeño de la economía, sus causas y características, así como sus consecuencias inmediatas y a más largo plazo. La historia económica es una rama fundamental del estudio de la economía, que brinda un contexto a lo que se estudia en la teoría con el apoyo de los métodos cuantitativos. Por ello, Joseph Schumpeter consideraba que para ser un buen economista se requerían conocimientos sólidos de teoría económica, matemáticas y estadística (ahora econometría)… e historia.

Al ser una ciencia social, la economía difícilmente puede proporcionar la experimentación que caracteriza a una ciencia dura. Los eventos no son repetibles y por tanto su análisis y predicción son complicados en sí mismos. En ese sentido, la historia económica brinda un “laboratorio” en el que podemos observar eventos o fenómenos sociales, que ocurrieron en una circunstancia específica, pero cuyo análisis nos permite entender mejor cómo funciona una economía, sus agentes, sus mercados, etcétera. Estudiar historia económica nos brinda más memoria, más pistas para entender la realidad, y por lo tanto más posibilidades para explicar el presente y vislumbrar el futuro. De ahí deriva, en buena medida, su importancia.

Como economistas, o como personas interesadas en las ciencias sociales, saber historia económica, de la misma manera que historia política y social, nos permite entender mejor nuestra realidad, de dónde venimos, cómo llegamos hasta donde nos encontramos, y por lo tanto qué tipo de escenarios se nos pueden plantear hacia adelante. Saber historia económica es un instrumento más del análisis económico, que nos facilita el entendimiento de nuestra realidad, del funcionamiento de una sociedad y de sus perspectivas a futuro.